Comienza una nueva vida

Bueno, pues finalmente comienza una nueva aventura que no se si saldrá del todo bien o no.
En principio, pinta bien la cosa. Me vengo de Málaga a Madrid a trabajar en un banco para ayudar a llevar las páginas web que tiene desperdigadas a lo largo y ancho del mundo. Jejejeje Suena bien, no?
En estos momentos estoy en el tren. Camino de la Capital. Mis padres me han dejado en la estación y se han quedado mi coche.
La despedida de Málaga ha sido muy rara. Supongo que algo tiene que ver el hecho de que llevo diciendo que me marcho no se sabe ni el tiempo. Y que una vez que ha llegado el momento ha sido un tanto extraño. Sigo sin tener la sensación de que realmente me vaya a vivir a otro sitio.
Quizás sea porque ya he estado viviendo allí. Y espero reencontrarme con amigos y conocidos.
Son las 17 y 03, y ya he llegado a Madrid. Mi amigo Iván, me ha dicho que vendrá pronto a recogerme. Eso espero. Acabo de abrir mi portátil en busca de una red wifi a la que conectarme, y nada. No hay nada. Recuerdan aquella canción que dice... podéis decir a gritos que es la capital de Europa....
En fin. Madrid tiene esas cosas.
Pero a mi me gusta. Esta tarde he quedado con mis amigos para celebrar el cumpleaños de uno de ellos. No sabemos qué le vamos a comprar. Ya veremos.

Me aburroooo

Me aburroooo

La vida tiene estas cosas...

Resulta que ayer descubrí una vez más lo curiosa que es la vida. Resulta que, como muchos ya sabéis, aquí en Marbella está bien visto eso de coger unos milloncitos de aquí, recalificar unos terrenitos de allá, poner la mano por aquí, ya me entendéis lo que alguna ministra ha bien llamado "las tentaciones". Sin embargo, si tú como ciudadano de a pie, cotidiano y natural, sencillo y honrado, pones tu coche en segunda fila... ¡malo! Porque claro, aparcamientos no se pueden hacer, hay los que hay y son los que son. Ahí no hay tu tia.

Ya vendrá un pintoresco policía municipal, de los de "si me contestas te meto una tunda palos hasta que revientes en el suelo", y te pondrá la multa de rigor por haber aparcado mal en doble fila. Y no es que diga que lo de aparcar en doble fila esté bien, pero si trabajas encima de donde tienes el coche y estás atento a cuando molesta, y además, el coche no molesta a ningún coche al pasar. Pues tampoco creo que sea tan grave.

Pero qué le vamos a hacer. La vida tiene estas cosas.

Voy a hacer caso a Ruben...

Pues eso, que después de tantos años con esto de Internet voy a acabar haciendo caso del menos internauta de mis amigos y voy a intentar publicar los "acontecimientos más importantes de mi vida" en Internet. Así, todo el ciberespacio, junto con Google, sabran qué me pasa. Ya no serán necesarias las microcámaras que se han inventado los chinos, ni colocar micrófonos detrás de mi monitor.
Se acabó la era de la oscuridad. Ya soy un blogger.